Por los 76 años de “El Heraldo”

Nicomedes Pincheira Rodríguez, el primer periodista de Linares

 

    Fundó “La Idea” en 1871, siendo el primer medio de prensa que tuvo esta ciudad, editado en la Imprenta “Los Hermanos”, con 19 años y cuando la Villa llevaba 77 años de existencia. Falleció a los 25 años en 1877.

 

Cuando la naciente Villa de San Ambrosio de Linares cumplía 77 años; providencialmente apareció en escena un joven de 19 años, creando el primer periódico, con el sugerente nombre de “La Idea”, cuyo primer número se editó un 31 de octubre de 1871, en la imprenta “Los Hermanos”.

Fue Nicomedes Pincheira Rodríguez, personaje romántico, culto, lleno de inquietudes, autodidacta, quien sintió la necesidad de expresarlas y dejar registro del quehacer de esta naciente sociedad, constituyéndose por consiguiente en el primer periodista o comunicador social que tuvo Linares.

En este nuevo aniversario del diario “El Heraldo” lo destaco, pues sus orígenes familiares como su corta vida, son atrayentes.

Gracias al Historiador Fernando Diez Aljaro y a su libro “120 años de periodismo comunal de 1871 a 1991”, descubrí a este personaje. Pese su delicado estado de salud y a sus 25 años de existencia, Nicomedes dejó un testimonio para su tierra natal expresado en este periódico, dando vida a una empresa periodística, impensada para esa época; pero muy necesaria para la naciente sociedad linarense.

Su génesis familiar es digna de conocerla, propia de un período de inseguridad que vivían los vecinos de las nacientes Villas en la Isla del Maule y del sur del país, quienes debían defenderse de salteadores y de los indios, como es este caso,  extractado de esta obra.

 

 

 

 

 

 

 

Asalto de la Villa por los indios

En 1798, cuatro años después de fundada esta Villa, levantó su vivienda  el matrimonio formado por José Santiago Tapia y Rosa Bilbao,  en el “cuarto de cuadra ubicado en las hoy calles Independencia con Chacabuco, esquina norponiente “naciendo un niño, que llenó de alegría al apacible hogar de este agricultor.”

Todo fue interrumpido por el asalto de montoneras de indios (pehuenches), que bajaban a robar y secuestrar, en la búsqueda de alimentos, enseres, cosechas, animales, llevándose a  mujeres y niños, como botín de guerra contra los “huincas” (no sólo fueron estos asaltos que sufrió esta Villa, en varias ocasiones; sino que también por la “Banda de los Pincheiras”).

Don José Santiago y su esposa Rosa, al igual que el resto de las familias, ofrecieron heroica resistencia en defensa de su heredad y sus vidas, siendo sobrepasados por el número y furia de los asaltantes.

Previniendo este fatal desenlace, doña Rosa, en un intento desesperado con la esperanza de salvarlo, ocultó entre unos matorrales a su pequeño hijo; sumándose después en auxilio de su esposo, cayendo ambos muertos a manos de los asaltantes. La modesta vivienda,  fue saqueada e incendiada, quedando totalmente en ruinas.

Los sobrevivientes, socorrieron a los heridos, dieron sepultura a los muertos y adoptaron las medidas para reconstruir la Villa, la que quedó prácticamente arrasada por este  sangriento ataque.

 

 Salvado por dama bondadosa

En esta tarea exploradora “estuvo una bondadosa dama, doña María Pincheira ... quien de pronto al acercarse a la que fuera la vivienda de don Santiago y de doña Rosa, sintió llantos ... encontrando al niño de esta malograda familia.”

Doña María lo incorporó a su entorno familiar, lo educó con afecto, dándole su apellido y dejándole una importante herencia y bautizado con el nombre de Santiago, “quien creció en un ambiento digno y de amor maternal”.

Santiago Pincheira, contrajo matrimonio con doña María Sotomayor, teniendo cuatro hijos: José Dolores, José Ignacio, José Dionisio y José de la Cruz.

Siguiendo con la genealogía, José Ignacio Pincheira Sotomayor, Notario de Linares, casó con Dolores Rodríguez Opazo, con ocho hijos, siendo uno de ellos Nicomedes, quien “creció en un ambiente culto y recibió una esmerada educación.”

 

El Periodista y Profesor

Según este Historiador, “en el seno de esta familia, Nicomedes aprendió a gustar de la literatura y era un amante lector de periódicos, que leía con avidez.”

De joven, por su delicada salud, le impedía efectuar labores pesadas,  muy propias de ese tiempo;  dedicando todo su tiempo y esfuerzos, a estudiar y escribir. “Su amor por la lectura lo hizo profundizar sus conocimientos de la historia mundial y  acontecimientos del país, desarrollando su sed de saber y perfeccionarse.”

Eso llevó al Rector del Liceo Baldomero Frías Urrutia a designarlo como Profesor de Historia y Geografía, en mérito a sus conocimientos y cultura, cargo que desempeñó hasta 1876, renunciando por salud.

Con 19 años conversó con su padre la idea de crear un periódico para Linares “quien la encontró acertada, pues sería un medio para que su hijo desarrollara su espíritu”.

Para editarlo, fruto de la impaciencia juvenil, improvisación y querer hacerlo todo,  su padre y un hermano lo auxiliaron, para cumplir este sueño.

Adquirió una imprenta, con sus tipos y prensa; se dio a la tarea de escribir crónicas, buscar auspiciadores y lo más difícil, aprender el arte de la tipografía, siendo una experiencia a la que se volcó en “cuerpo y alma”, sobrepasando sus debilitadas fuerzas por su delicada salud.

A la Imprenta la denominó “Los Hermanos”; para evitar ser confundida por el apellido, con los “Hermanos Pincheira”, feroz banda que había asolado la zona entre 1817 a 1832, que asaltaron Linares en más de una ocasión, cuyo sólo nombre producía pavor.

 

 

Nace la “Idea”

Cumplidas las formalidades legales, y superadas por el ímpetu de crear el primer periódico, se edita “La Idea”, cuyo primer número se publica el 31 de octubre de 1871, “siendo la marcha inicial del periodismo en la Villa de Linares, entregándose este ejemplar en forma gratuita a los vecinos ...y de quienes deseen continuar recibiéndolo pueden pasar a esta Imprenta a arreglar el precio de su suscripción.”

Se relata que Nicomedes escribía los anhelos de la sociedad de Linares por formar un Club Social, contándose hasta el Párroco entre los 52 socios fundadores.  “Nicomedes imprimió a su crónica un carácter jovial y ameno con una narrativa de los hechos”.

Su primer Editorial expresa su independencia “tenga como único trabajar por la realización de toda idea social, mercantil y local, por la unión de todos en un pensamiento del que será su legítimo órgano”. Ofrece sus columnas “a toda ocurrencia literaria, social y comercial, exceptuando las políticas”. Finaliza  “no reconocer ningún partido político y saldrá una vez por semana” (fotocopia del N°1 está en la Biblioteca Pública de Linares).

Estuvo enamorado de una señorita de la sociedad linarense, “pero su timidez le impedía nombrarla, a la cual le dedicó bellos poemas de amor, creando un acróstico en su periódico que decía María.”

 

La Villa progresa

 

 “La Idea” registró  importantes acontecimientos que estaban cambiando el rostro a Linares, como fueron la creación de la provincia el 11 de diciembre de 1873; la llegada del primer tren de pasajeros el 27 de octubre de 1874; la creación del Liceo de Hombres el 22 de diciembre de 1874; el nombramiento del primer Rector Baldomero Frías Urrutia el 11 de enero de 1875 y el inicio de clases el 19 de abril de 1875,  entre otros acontecimientos relevantes.

Por su salud debilitada, renunció a las clases del Liceo. Falleció a la edad de 25 años, el 27 de octubre de 1877, “apagándose la vida de este joven soñador, gran periodista y pionero en su ciudad”.

Tuvo 201 ediciones, entre el 31 de octubre de 1871 al 12 de febrero de 1876, manteniéndose en circulación durante cinco años. Sólo la salud de su propietario y Director, obligó a cerrar sus puertas.  Hasta ahora, se han publicado 104 entre diarios y periódicos en Linares, siendo “El Heraldo” el de más larga duración (76 años).

El manto del olvido ha cubierto el nombre de este joven e ilustre linarense, pionero de la prensa escrita. Nunca será tarde para rendirle el homenaje del recuerdo que en justicia se merece.