Página 67, un film joven
Es un joven reportero de 24 años. Su nombre: Hermes Oróstica Maureira. Se desempeña como jefe de redacción de diario “El Heraldo” de Linares.
Un día, no pudo resistir más la tentación de filmar. Reunió a sus amigos y les dijo: “haré una película. Para comenzar, un corto o mediometraje en 16 mm. Necesito la ayuda de ustedes y de toda la ciudad…”
Parecía una tarea imposible de realizar, pero “trabajando intensamente y superando las dificultades sobre la marcha” terminó el film y este, titulado “Página 67” se estrenará con gran pompa en el Teatro Municipal de Linares, el 8 de febrero.
Hermes Oróstica hizo de todo en el film: director, argumentista, camarógrafo y escribió la música. Para los dos únicos papeles protagónicos eligió a sus amigos: Fernando Latorre y Patricia Olivares. La música de fondo fue grabada por otros amigos, Los Chef, un cuarteto juvenil linarense.
Decía Oróstica -a Revista Ecran, cine nacional- “recibí amplia colaboración de toda la gente a la cual le hablé de mi proyecto. Para adquirir la película tuve que gastar mis ahorros, pero además obtuve el apoyo económico del comercio de Linares. Luego para proceder a la filmaciones, solicité prestada una cámara al padre capuchino Santiago González”
Ahora Oróstica está satisfecho: ha logrado dar el primer paso. Un film en colores; de una hora de duración. Del mismo, estima que ha logrado transmitir el mensaje que se propuso dar a través de él.
El film, cuyo título “Página 67” alude a la página de un diario de vida de un joven cualquiera, expone lo que él considera que es un problema importante en la vida de los jóvenes de provincia: la obsesión de la capital. Dice Oróstica, a Ecran- “es sabido que todos los jóvenes del país sueñan con partir a Santiago. En la capital concentran su interés y el anhelo de un éxito inmediato”
En el film, el protagonista también quiere emigrar. A través de su vida diaria va definiendo un contraste entre su ciudad y la capital. Cuando al fin decide marcharse, desiste. Abandona el vehículo que le conduce a Santiago, porque repentinamente ha comprendido que su destino está ligado a la tierra donde él nació y ha vivido hasta ahora.
Después de su estreno en Linares, el film se exhibirá en todas las ciudades y localidades de la provincia y del sur del país. Oróstica estima que su mensaje debe ser atendido por todos los jóvenes provincianos.
“Y desde luego, también espero exhibirlo en Santiago”, dice finalmente. “Iré a la capital con el film, pero no para quedarme en ella”
El Instituto Chileno-Británico de Cultura, en asociación con el Consejo Británico; en el marco de unas actividades culturales –en homenaje al Mes de la Patria- septiembre de 1968, en Santiago (Santa Lucía 124), hubo un programa que contempló la muestra de cuatro trabajos de cine-arte: “La Feria Volandera”, “La ciudad del cobre”, “Manutara-Vía Rapa Nui” y “Linares” (en realidad “Página 67”; por gentileza de su autor: Hermes Oróstica), un corto de cine-arte con tomas dela vida en esta interesante ciudad sureña.
Poeta y periodista de origen linarense su poesía nostálgica intenta rescatar “el tiempo del minuto perdido” y las sombras familiares de la infancia. El hablante lírico ve alejarse los minutos de todas las horas en cálidas escampadas provincianas.
Pesar provocó el deceso del conocido periodista Hermes Oróstica Maureira, quien dejó de existir en Linares a la edad de 64 años.
Hermes Oróstica trabajó en diversos medios locales como Radio Soberanía y Diarios El Heraldo, La Provincia y Sucesos. Posteriormente continuó su labor periodística en Coyhaique, siendo corresponsal de La Tercera y Radio Cooperativa.
OBRAS:
Origen de los minutos perdidos y el Cajón el Melado. Linares. 1966.
El pozo y otros cuentos. 1974. (Referencia: González C. Jaime. Diario El Heraldo. Linares, 24.09.1975).
MANUEL QUEVEDO MÉNDEZ
Quizás las nuevas generaciones, empoderadas de las redes sociales, de las más innovadoras tecnologías y de marcadas influencias extranjeras pueden opinar que esta película adolece de muchas fallas. Pero, sin temor a equivocarme, "Página 67" es la manifestación de las mismas inquitudes que hoy vivimos. Y ese mensaje continúa siendo tan válido como el año 1967, fecha de grabación de este material que hoy posee el valor de un documental.
Observar lugares como la "Estación de Trenes", la "Galería Cucho Díaz" o la Casa Cuesta, observar el vestuario de las personas y el entorno que en ese entonces presentaba nuestra ciudad, produce emociones. Ver cómo éramos y lo que, en términos tangibles, hemos logrado también debe hacernos sentir orgullosos. Sin duda mucho hemos avanzado, y aun nos queda mucho más. Pero gracias a Hermes Oróstica tenemos un prámetro real con qué medirnos.
